martes, 3 de febrero de 2009

Elíptica

Siento un vacío crepuscular
araña mis entrañas y me atrapa
Estoy viviendo en una elíptica
donde vago sin rumbo ni prisa

Pienso en un deseo
quito el velo de tu encierro
sales por la vereda marchita
huyes hacia la ruta infinita

Un resplandor nubla mi visión
quema como esta angustia interior
Luego un clavel toma mi mano
lúgubre y fugaz sensación
que se anida y se aloja en mi corazón

Ahora te veo bien
la seda que cubría tu rostro
ha desvanecido,
se ha desfigurado

Contemplar
Admirar el fuego de tus ojos
color miel
expresión inequívoca de belleza

El clavel ha soltado mi mano
estoy indefenso en un mundo tirano
El candor de las brazas se aproxima
y veo bajar una estrella
que exclama y por mi espera

Mi tiempo aquí se ha agotado
frenesí oculto
en medio de la nada...
Vuelvo al país de los astros
donde la elíptica me aguarda
con sus luces y sus trazos

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